Páginas

Expresar los sentimientos es poco fácil

En ocasiones, expresar los sentimientos es difícil y no salen las palabras que uno desearía por miedo a hacer daño a personas o sencillamente por miedo a equivocarse a la hora de expresarse y que las palabras no transmitan los sentimientos que uno quiere reflejar. Por eso, a mí me gusta más poder hablar, pero hoy he querido dar gracias por los dones que la vida día a día me da y dar reflejo de ello.

Son tantas pequeñas cosas que a diario tenemos y no sabemos apreciar. Hasta que de pronto, las perdemos, las añoramos y es entonces, curiosamente, cuando disfrutamos lo que poseemos, comenzamos a valorar aquello que forma parte de nuestro entorno, de nuestra vida cotidiana, que está ahí, y que es lo que hace que este día a día sea tan interesante, tan intenso por vivir, tan refrescante en estos días de calor. Me refiero a todo lo que tenemos.

Cuando observo las lecciones que día a día aprendo de los más cercanos a mí, sigo dando gracias por ello, porque cada día sigo formándome. A veces, ante comentarios de personas mayores que alegan que ya no pueden cambiar, me quedo perpleja y me quedo en silencio, nostálgica, un poco apenada, porque en mi camino lo más importante es el aprendizaje que obtengo cada día.

A veces mi hijo es mi maestro, porque; a pesar de su corto camino; sin saberlo, me muestra formas para cambiar en mi manera de actuar, a la hora de acometer las tareas cotidianas, en la forma de tomar la vida. Ellos, los que son un poco más jóvenes, siempre aportan frescura, calidad de vida, ganas de acometer y esa aptitud me hace reflexionar que cada día, cada nuevo amanecer, es interesante, es increíble.

Y agradezco, seguir aprendiendo en este camino que recorro, porque esta enseñanza me viene dada por personas cercanas, por circunstancias cotidianas, por acontecimientos y situaciones que durante este periodo estival se me han presentado.

En algunos momentos me cuestiono para qué este acontecimiento se me ha presentado… y la respuesta aparece. Hay veces que tarda un tiempo en darse y cuando de pronto encuentro la contestación a mis dudas, aparecen en mi vida una serie de escenas; semejante a una película; que me hacen ver el por qué y para qué ha sucedido y eso es lo que hace que se dibuje en mi cara una alegre sonrisa de entendimiento, de gratitud, de satisfacción y como siempre, una alegría por continuar aprendiendo, por seguir disfrutando, por seguir avanzando.

La vida está llena de buenos momentos, algunos ya forman parte del pasado y no se han ido, están en nuestros corazones. Al volver a las tareas cotidianas, a reencontrarnos con nuestros amigos, con nuestros compañeros algunos de ellos reaparecen. 

En ese momento: ¡Quiero transmitiros la alegría por continuar con ánimo y con ganas! y siempre con optimismo.

Una gota de agua tras otra, llena un vaso. Y una sonrisa y una manera optimista de pensar, llena nuestras vidas.


¡Disfrutemos este camino de manera divertida!


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cuida tu lenguaje. Es importante como comunicamos lo que queremos decir.

Gracias por tu amor y comprensión.